Durante muchos siglos las personas con discapacidad han estado expuestas al rechazo, odio y asombro de la sociedad. Inclusive había familias que se sentían avergonzadas de tener un hijo o familiar con alguna discapacidad y muchas veces eran encerrados, expulsados del entorno familiar y social, hablar del educativo era impensable. Todo esto autorizado implícitamente por la sociedad y un modelo medico sujeto a limitaciones.

A finales del siglo XX se vislumbra el nacimiento del modelo social con campañas asociadas a los derechos civiles, los países a la cabeza de este modelo EEUU e Inglaterra su principal lucha es trabajar por los derechos de las personas con discapacidad, exponiendo su inconformidad por el modelo tradicional que manifestaba que la discapacidad era sinónimo de un cuerpo o mente defectuosa (Hernández ,2015).

Este modelo Social consiste en derribar barreras sociales sobre los prejuicios a la diversidad, cambiaron los conceptos, el individuo con discapacidad toma las riendas su vida y tiene igual oportunidades. Para López (2016) “postula que la discapacidad es un hecho universal, es decir cualquier persona está en situación de riesgo debido a los diversos ambientes de una comunidad ya sea que se adquiera,  por herencia o por un accidente” (p.13).

En consecuencia el modelo social de la discapacidad se presenta como un paradigma diferente en la cual el procedimiento al abordaje a la discapacidad, ha tenido avances teóricos y prácticos que han ayudado a una normalización  en cuanto a leyes que soporten la situación de la escolaridad de las personas con discapacidad. Cabe recalcar que con el modelo social de la discapacidad ha permitido dejar atrás los mitos sobre las causas de la discapacidad estableciendo que no tiene origen religioso, ni científicos, sino que son de tipo social, porque la sociedad es la que aprueba o condena lo diferente.

Para Ordoñez y Mendoza (2019) “el modelo social de discapacidad, es un modelo idóneo, tiene como objetivo que la persona pueda vivir por muchos años y de la mejor manera, además de ostentar una vida social amplia y organizada, para satisfacer las necesidades humanas”.

En consecuencia el modelo social de la discapacidad tiende a defender los derechos humanos y promulgar el respeto a las personas con discapacidad inclusive desde las normativas legales. Este modelo social de la discapacidad va ayudar a que se potencie la dignidad e igualdad entre los seres humanos propiciando la inclusión social y educativa, estos principios facilitan al estudiante con discapacidad a integrarse en la sociedad como un ser independiente, que ha logrado aprender en el aula de clase dándole una oportunidad laboral a futuro con terapias ocupacionales acorde con su realidad para que pueda superar esas barreras que le impiden crecer y transformarlas en oportunidades de aprendizaje continuo (Maldonado, 2013).

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SOLÍS MONCADA JÉSSIKA K.

SITUACIÓN EDUCATIVA DE LA POBLACIÓN CON DISCAPACIDAD MÚLTIPLE. ESTUDIO DE CASO POR CRANEOSINOSTOSIS CONGÉNITA

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